Al elegir sombrillas para jardin es frecuente caer en errores como escoger la más económica o fijarse tan solo en el diseño. Al final, las sombrillas son muy importantes para poder estar a gusto al aire libre, sobre todo cuando hace mucho sol, y se va a notar considerablemente la diferencia entre una sombrilla barata y una de calidad.
Lo que se invierte a mayores repercutirá no solo en mayor calidad sino también en mayor durabilidad, por lo que la sombrilla nos va a salir más económica a medio plazo. Pero esta no es la única razón para comprar un parasol premium, estos son los otros motivos para hacerlo.
- Protegen mejor del sol. Las telas de una sombrilla de calidad son también de mejor calidad y no solo protegen mejor de los rayos del sol, también aíslan del calor, permiten eliminar los rayos perjudiciales e incluso pueden filtrar contaminación dependiendo del modelo escogido. Suelen ser, además, de mayor tamaño, lo que permite que la zona de protección sea mucho mayor sin tener que mover la sombrilla cada poco tiempo.
- Son más resistentes al viento. El viento es un problema en muchos lugares. Puede doblar un parasol de mala calidad e incluso romper la tela. Pero con una sombrilla buena esto no tiene por qué pasar, al contrario. No solo nos va a proteger del sol, sino que también pueden ser un buen aislante para el viento, haciendo de parapeto resistente y consiguiendo que el lugar en el que estamos sea mucho más acogedor y agradable.
Para eso no solo la tela tiene que ser buena, todo el armazón debe de tener suficiente calidad y resistencia.
- Soportan mejor las inclemencias. Si las sombrillas están fuera durante todo el verano, tendrán que soportar no solo el sol, que ya de por sí puede ser suficiente para dañar una tela barata, sino que también soportarán lluvias ocasionales. La combinación de agua y de sol puede hacer que una sombrilla mala se deteriore en un tiempo récord.
La tela se desgastará rápidamente, perderá primero su color y su belleza y enseguida se abrirá. Pero, además, nos podemos encontrar con óxido en las partes metálicas que hagan que se rompan los radios o que no se pueda doblar con comodidad. Al final, es posible que no tengamos parasol ni siquiera para la temporada de verano completa.